La potencia de las instalaciones eléctricas viene determinada por la capacidad de admitir o soportar de la instalación el paso de esa corriente solicitada por los receptores.
Hay que tener en cuenta los conductores y la longitud de éstos.
Las protecciones irán de acuerdo con la sección del cable a proteger. Cada cable dependiendo de su sección podrá soportar el paso de la corriente sin ocasionar un peligro para el local o vivienda.
Es muy corriente acudir a un instalador eléctrico y pedirle que aumente la potencia de la instalación, es amenudo frecuente escuchar : los automáticos me saltan cuando van dos cosas a la vez etc.. entonces se entiende que deberíamos cambiar el automático por uno de valor superior para solucionar el problema y que el cliente diga ya no me salta la luz.
Hay muchas veces que se cambian los automáticos por unos de valor superior, sin tener en cuenta el resto de la instalación, lo único que interesa es que no salte, tal y como se hacia antes con los fusibles de hilo, se iban añadiendo hilos hasta que no se fundía.
En los cuadros de protección de las viviendas y locales tenemos primero ya según el REBT 2002 un interruptor general automático con una protección contra sobretensiones, este interruptor IGA es que determina la máxima potencia admisible para este cuadro de protecciones, teniendo en cuenta las líneas que cuelgan de él. Seguida mente tendremos en una caja precintable el llamado ICP es el controla la potencia contratada con la compañia de suministro eléctrico, hay que distinguir entre distribuidora y comercializadora, la potencia del ICP será igual o inferior a la del IGA. Después a continuación normalmente aparece el ID , protección contra fugas de corriente, a partir de aquí se distribuye en varios circuitos, correspondientes normalmente uno a iluminación otro a tomas de corriente, lavadora , horno....., cada circuito de distribución tiene su conductor y su protección adecuado, o debería de tenerlo. A veces es normal encontrarse circuitos que no tienen las protecciones correspondiente a la sección de su conductor, estos circuitos están sometidos a intensidades superiores a las que pueden soportar nominalmente sin problemas.
Pongamos como ejemplo un circuito de bases de enchufe o tomas de corriente que puede tener un conductor de 2.5 mm y varias tomas , se entiende que puede tener una protección de 16 A .Si a este circuito le conectamos dos estufas que consumen más de 16 A , nos saltara la luz de este circuito, ¿podemos cambiar este automático por uno de 20 A?....
Pongamos otro ejemplo: una instalación que cuando van la lavadora y el horno salta toda la casa por sobrepasar la potencia contratada, ¿podemos cambiar el ICP a uno de superior?
Podríamos poner muchos supuestos, en algunos seria factible hacer cambios a más amperios, pero en otros sería una temeridad, como en el primer caso no se puede cambiar un automático a 20 A con unos conductores de 2,5 mm.
El aumentar el calibre de protección de un automático o de un fusible pude dar lugar a que la instalación este desprotejida, de tal manera que no salte el automatico cuando la instalación está sometida a un esfuerzo que no podra soportar y es cuestión de tiempo que pase una tragedia.
Un automático magnetotermico si es de 20 A con su dispositivo de disparo magnético dispara cuando se supere este valor en caso de corto-circuito saltaría siempre, pero el problema surge cuando un cable puede soportar 10 A y le hacemos pasar 18A y lo tenemos protegido con 20A, no saltará y se puede encender en cable sin que el automático pueda evitarlo.
No se debe correr ningún riesgo, es necesario contar con un instalador autorizado que nos pueda indicar la solución más idónea para cada situación.
